jueves, 21 de octubre de 2010

La Muestra

Hoy se iniciaron las proyecciones para la prensa de las películas programadas en la LII Muestra Internacional de Cine. Estas son mis opiniones:

"El extraño caso de Angélica" ("O estranho caso de Angélica", Manoel de Oliveira, Portugal). Lisboa, el Tajo, Manoel de Oliveira... De cómo atrapar el alma de una mujer sonriente en una fotografía, y ser atrapado por ella...

"Verano de Goliat" (Nicolás Pereda, México). La ñora desquiciada por el abandono... la ropa del amado como segunda piel... repta en el agua primigenia entre sonidos animales, y emerge a los créditos finales ahí donde la película apenas revelaba a su personaje...
El cine mexicano como descanso en la Muestra: para quedarse en casa...

"Hahaha" (
Hong Sang-soo, Corea del Sur). Encontrarse en la mirada de esa mujer, enamorada de una fantasía que la maltrata. Entre el amor ingenuo y el amor cínico, la depresión como el amigo común que los une y los oculta mutuamente. Ella sólo quiere ser deseada o reconocida o tener una casa. Gracias por una buena historia.

"Un hombre que llora" ("Un homme qui crie", Mahamat-Saleh Hauron, Francia-Bélgica-Chad). Un león cansado, un campeón de natación confinado como cuidador de una piscina de hotel de lujo, un padre que se desmorona cuando la repentina conciencia de su envejecimiento le estalla en el rostro. La sombra ominosa de la guerra, la huída culpable hacia el caos del que todos huyen. Un hombre que llora: una historia sin fuerza, un final sin sustento.

"Copia fiel" ("Copie conforme",
Abbas Kiarostami, Francia-Italia). La pareja, otra vez. El matrimonio como simulacro, basta para iniciarlo una mirada externa. El pleito continuo como combustible, no para mantener el movimiento sino para consumirse en sí mismo, la tensión como condición de cercanía. Hasta el momento de decisión: ¿sigo en el simulacro, o regreso a mi realidad? Final abierto. Copia fiel: copia conforme.

"Anticristo" ("Antichrist", Lars von Trier, Dinamarca).
Cuando llegan los tres mendigos, alguien muere. Desconsuelo, dolor, desesperación. El sexo como puerto de fuga. El amor que sólo es posible como daño al amado. Ir al encuentro de nuestros miedos, perdernos en la bruma, encontrarnos en la muerte... regresar entre fantasmas. Desde la depresión más profunda, Lars von Trier: Anticristo, cine puro, la cima de esta Muestra.

"En un rincón del corazón" ("Somewhere", Sofia Coppola, Estados Unidos).
Un joven actor de Hollywood. Se aburre. Fin. Somewhere: para quedarse en casa.

"La leyenda del tío Boonmee" ("Loong Boonmee raluek chat",
Apichatpong Weerasethakul, Tailandia). Profusa, confusa, difusa. La leyenda del Tío Boonmee.

"Submarino" (Thomas Vintenberg, Dinamarca).
Sólo 50 minutos de buen cine, cine duro, cine de Dogma. Un hombre puesto en el límite desde la entrañable culpa por la muerte de su hermano niño. Su único amigo y su igualmente patética amante sobreviven apenas en el borde del vacío, hasta que... "por favor, ya no resisto más", disolvencia a negro... el resto puede verse en un autobús.

"La pivellina" (
Tizza Covi y Rainer Frimmel, Italia). Aia. Dos años, tal vez. De cómo una mujer hermosa llega como inesperado regalo del azar, nos ilumina la vida y nos dibuja una sonrisa. Hasta que quien la abandonó regresa por ella. Documental que es película neo-neorrealista. La pivellina: una trampa de la memoria, una historia para vivir.

"La mirada invisible" (Diego Lerman, Argentina).
Los vigilantes también están en prisión. La mirada invisible, panóptica, omnisciente, sólo es posible desde la mierda. Sexualidad femenina construida con el robo de ruidos, olores, miradas: la lenta construcción, detalle a detalle, desde la opresión carcelaria que es el encierro escolar, de un personaje femenino patéticamente entrañable (excelente actuación, excelente fotografía). La mirada invisible: muy buen cine argentino.

"Del perdón al olvido" ("Life during war time", Todd Solondz, Estados Unidos). Por momentos casi lo logra. Complemento de aquella igualmente hipócrita y culposa "Felicidad". "El mal está dentro"... pero le falta fuerza y valor para rasgar la superficie de colores pastel, o para elevarse a la parodia total de los amores enfermos de tres hermanas desde la agotada tradición woodyallenesca. La culpa judeocristiana que nos condena al perdón o el olvido como única alternativa de fuga del american way of life.

"Materia blanca" ("White material", Claire Denis, Francia-Camerún). Malhecha. Y la pobre protagonista que se pasa hora y media esperando que alguien -la directora, el guionista, el fotógrafo tembleque, alguno de los actores de reparto igualmente extraviados- que alguien le diga por compasión qué está haciendo ahí.

"Los gatos persas" ("Kasi az ggorbehaye irani khabar nadareh", Bahman Ghobadi, Irán). Cede a la tentación de un final melodramático que no venía al caso, y pierde la perfección. Como documental es maravilloso, como historia cinematográfica es extraordinaria. Rasgar cuántos velos para asomarse a la vida escondida de los jóvenes de Teherán, la música como columna vertebral de una vitalidad invencible. Los rostros, las voces, la poesía de una cultura milenaria y contemporánea.

"De hombres y de dioses" ("Des hommes et des dieux", Xavier Beauvois, Francia). "Tú me envuelves, me sostienes, me abrazas", ¿cómo podría dejarte? No es el credo, no es la liturgia, no es el lugar... no es el Tiempo, que termina matándonos por empeñarnos en nuestro valor individual. La amorosa construcción de una sonrisa colectiva, la paz por fin encontrada en el fondo de uno mismo. Es la fraternidad creada por un Padre común. Nostalgia de la familia. La maravilla de lo absoluto.

"Conocerás al hombre de tus sueños" ("You will meet a tall dar stranger", Woody Allen, Estados Unidos). La misma película de Woody Allen que hemos visto tantas veces. Agotado hace treinta años: los mismos temas, los mismos personajes, los mismos viejos recursos cinematográficos, ¡la misma música! Los mismos a mi alrededor que se sienten obligados a reir con cualquier diálogo.

"Un filme socialista" ("Film socialisme", Jean Luc Godard, Francia). Si mantienes la capacidad de desconcertar, no eres un viejo. Un reto seguirlo hasta el final. La única forma de aproximarse a la realidad dislocada es con un lenguaje dislocado. La música, la geometría, la filosofía, la utopía: vanos esfuerzos por comprenderla. "Podemos tener ideas diferentes, si compartimos nuestros sueños".

"Los chicos están bien" ("The kids are all right", Lisa Cholodenko, Estados Unidos). De la dificultad de la vida en pareja. También en una pareja de mujeres lesbianas. El juego de roles que todos jugamos: lo masculino y lo femenino, lo adulto y lo pueril. La vida en pareja como una negociación cotidiana, entender y seguir. Errores con culpa, errores sin culpa, errores grandes y pequeños, errores que merecen el perdón. La paternidad vacía, la fraternidad como refugio posible, los amigos que acompañan y compensan. Los niños que crecen, que se hacen adolescentes, que se van. The kids are all right. Buena película. En días difíciles.

"Tetro" (Francis Ford Coppola, Estados Unidos). Buenos Aires... ¿y por qué no? Dónde, si no, encontraríamos a El Perseguidor y a La Maga. Grafiti inicial: “No sueltes la soga que me ata a tu alma”. Y una eterna sonrisa amorosa que ilumina la vida. El sonido más hermoso del universo. Con la fuerza del cine en blanco y negro. Hasta la Patagonia, donde se desvanece como una telenovela elegante. Tetro: el viejo Coppola, una clase maestra de guión cinematográfico durante la primera hora, sin fuerza para llegar hasta el final con la misma asombrosa emoción.

"Dulce niño" ("szelíd teremtés. A Frankenstein-terv", Kornél Mundruczó, Hungría). Técnicamente impecable... Un edificio próximo a la demolición como escenario intemporal, rostros sin expresión que obligan a construir la emoción de los personajes... Una historia que reclama su propia credibilidad desde el principio, pero que finalmente deja demasiados huecos de inverosimilitud, y termina deshilachada. Un intento al que pierde su propia ambición: reelaborar el mito de la criatura de Frankenstein, desde el extravío por la paternidad ausente.

"El amor de mi vida" ("Bright star", Jane Campion, Gran Bretaña). Grand finale. Una impecable película de época, al estilo británico. El nacimiento del amor romántico, con su final de tragedi: la muerte del jovencísimo poeta John Keats, su amor necesariamente no culminado con una campestre artista de la costura. Maravillosa iluminación, extraordinarias actuaciones... y esas tomas cerradas sobre la aguja, el hilo, la tela, las manos...

viernes, 8 de octubre de 2010

Mi voto a la radio para los niños

Me invitaron a participar en el concurso de programas radiofónicos convocado por la octava Bienal Internacional de Radio, como uno de los tres jurados en la categoría de programas para niños. Hoy viernes, 8 de octubre, durante la clausura al mediodía se anunciaron los programas ganadores, por lo que ya puedo publicar aquí mi voto particular, y mis comentarios acerca de la decisión final.

Acepté ser parte del jurado aunque el concurso de la Bienal se ha distinguido durante sus catorce años por sus criterios viejos, convencionales, timoratos. En éste caso, conocí los nombres de mis compañeras dos semanas antes de la deliberación final, y quiero decir que desde entonces y hasta la firma del acta oficial no me he sentido orgulloso de ellas, precisamente por ese prejuicio que encontré fundado: Martha Romo, creadora de Radio Rin -¡hace veinte años!-, y Maru Enríquez, cantante y locutora.

Yo espero haber aportado la experiencia de nuestro trabajo de quince años en la investigación y la promoción de la radio para los niños con una perspectiva comunitaria, la organización de cuatro encuentros regionales de productores y la convocatoria a un premio de tesis universitarias sobre la radio y los niños.

Esa experiencia, pero sobre todo la actitud correspondiente: importa animar ensayos colectivos, que como principio aspiren a la trascendencia, en espacios sociales como la escuela y el barrio, que apuesten por la presencia de los niños no como coartada sino como condición, que sueñen con una radio con imaginación y respeto a los deseos y la inteligencia de los niños.

Durante las dos reuniones del jurado para decidir a los ganadores me empeñé en que no premiáramos lo que se ha hecho hasta ahora, sino posibles rutas de fuga hacia la nueva radio para los nuevos niños. Sin ignorar a la calidad radiofónica como prueba suprema (tanto en producciones profesionales, institucionales o independientes, como en producciones amateurs). Nueva radio en temas, sí, pero sobre todo por sus exploraciones y toma de riesgos en formatos y géneros.

Mi única duda para "Sabines en sueños", de radiombligo de Chiapas, ganador del primer lugar, era si podía considerarse como un programa para niños. Por fortuna para todos, desde el inicio de la discusión entendimos que la poesía es para cualquiera, y particularmente para los niños, de cualquiera edad. Me parece una pieza radiofónica muy cercana a la perfección -por el tema, el guión, las voces, el ritmo, el uso de la voz del poeta... emocionante y conmovedora-, y la rúbrica sin duda hubiera sido la ganadora si existiera esta categoría.

Insistí en la posible premiación a un programa de radio arte para niños, producido por La Tribu, vanguardia de la radio comunitaria en Buenos Aires: "En la boca no", que yo propuse para el segundo lugar. Sigo convencido de que deben alentarse intentos como éste de ofrecer a los niños nuevas formas de hacer y escuchar la radio, además con una excelente calidad. La objeción fue acerca de su contenico, que en parte reproduce y exalta valores políticamente incorrectos. Como si los niños no vivieran en una realidad así, con tales estímulos y lenguaje. Y también fue esa irreverencia lo que me encantó.

"Viaje al mundo de la imaginación", de la Universidad de Colima, ganador del segundo lugar, me pareció desde que lo escuché que debería haber sido el gran ganador. Pero me decepcionó entrañablemente saber que es un programa viejo, que no se ha replicado de ninguna forma, que se había presentado a concurso repetidas veces. Eso contradecía mi argumento principal, de manera que finalmente yo lo hubiera quitado sin más de entre los ganadores.

No lo hice porque así el resto del jurado hubiera subido todavía más un programa que a mí nunca me pareció merecedor de ningún reconocimiento pero que finalmente quedó en el tercer lugar: "Microbitos", del Instituto Mexicano de la Radio, un programa mal hecho que fue mencionado y por fin premiado sólo por el tema que trata. No fui capaz de convencerlas de que no basta un tema "necesario y urgente", independiente de su mal tratamiento que no excusa la transmisión en vivo.

Para el tercer lugar, o quizá para el segundo si se movía el radio arte, mi propuesta fue "Independencia, un sueño de 200 años", una producción de Radio Universidad Veracruzana sobre la presencia de Morelos en Córdoba. Una inmejorable obra de radio didáctica que sucede en un salón de clase y el patio de recreo, con la maestra y sus alumnos muy verosímiles -gran trabajo de guión y de voces-, una clase de historia que demuestra que la radio puede ser un buen recurso de educación. La objeción: ¡que tiene mucha violencia!, ¡si hablamos de la revuelta por la independencia!

El jurado decidió que no habría una mención honorífica. Para estas yo tenía dos propuestas, sólo aparentemente contradictorias con mi argumento central de animar la innovación hacia el futuro de la radio para los niños: "¡A bailar, niños!", de Cosquillas, un gozoso y muy bien hecho programa para poner a bailar a los niños, y otro programa argentino, "Cuenta que te cuenta", donde la voz absolutamente expresiva basta para contar un cuento. El regreso a lo elemental, a la radio pura.

En cambio consideramos, y finalmente desechamos, por una parte "Riofaunando" que contiene muy buenas canciones compuestas e interpretadas por el mismo equipo de producción y una narración que fluye hasta el mensaje final: contra la contaminación de los ríos; pero hay una confusión de géneros y formatos que muy probablemente no podría seguir un niño promedio. También consideramos dos programas indigenistas, "Oquichpilillo (niño querido)" -que a mí me hubiera satisfecho particularmente porque se refiere a la cultura tenek, de San Luis Potosí- y "Conservando nuestro idioma indígena", que asimismo desechamos porque su ritmo obliga a una atención especial que no se encuentra en los niños promedio.

Aquí termina mi participación en ésta octava Bienal Internacional de Radio.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Periodistas con miedo y sin oficio

Diario de Juárez se rinde ante quienes amenazan su trabajo. ¡Carajo!, ¿alguien se imagina un editorial así de despreciable hace apenas veinte años? "Señor presidente, ¿qué quiere de nosotros?" Qué pena, es de pena ajena... Y no es una vileza, Ciro, aunque desde luego se entiende y se comparte la indignación por el asesinato de su reportero. El problema es otro.

"Como trabajadores de la información queremos que nos expliquen qué es lo que quieren de nosotros, qué es lo que pretenden que publiquemos o dejemos de publicar"... Reconocen a los criminales como “las autoridades de facto, porque los mandos instituidos legalmente no han podido hacer nada para impedir que nuestros compañeros sigan cayendo”. Bueno, ¿y por qué bajarse el pantalón ante la autoridad, cualquier autoridad?

Una pista para explicar esta cobardía y falta de ética profesional es su mención a "esta guerra en la que ustedes y el gobierno federal se hallan" (yo subrayo). Ellos como periodistas no participan, como seguramente no participaron en la prevención. E incurren en la imbecilidad de que el presidente Felipe Calderón emprendió la campaña contra el narcotráfico "para conseguir la legitimación que no obtuvo en las urnas".

El editorial del lunes de El Universal, que dirige el periodista Jorge Zepeda Patterson, apunta en la dirección correcta: "¿Cómo llegamos a esto? Pedir explicaciones a los criminales ante el silencio criminal de los gobiernos". ¿Cómo llegamos a esto?, ¿qué hicimos y qué dejamos de hacer los periodistas para llegar a esto? Es lo que se debe discutir. Y resolver.

En su editorial del día siguiente, El Universal insiste en la misma línea de culpar al gobierno federal, seguramente con razón pero eludiendo la crítica a la actitud de Diario de Juárez. En cambio, Carlos Marín (periodista, director de Milenio) sí acusa: "En cuanto lo que no se puede además es imposible y empresa y trabajadores del Diario de Juárez están convencidos de no poder ejercer el periodismo, ¿por qué no cierran el periódico y se dedican a otra cosa, en vez de capitular ante la delincuencia?"

Ya el viernes, El Universal hace un llamado puntual: "Necesitamos establecer protocolos de seguridad, mecanismos de reacción inmediata ante amenazas y agresiones, unificar prácticas mínimas de conducta editorial en la cobertura de hechos violentos, de tal manera que, sin renunciar a nuestra labor de informar puntualmente lo que pasa en la sociedad (yo subrayo), podamos proteger la vida de nuestros compañeros de profesión, así como los derechos y la dignidad de las víctimas. Acuerdos básicos sólo pueden surgir de los propios medios".

El subsecretario de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Gobernación, Felipe Zamora, informó el mismo lunes 20 que a finales de este mes de septiembre detallarán los mecanismos de protección para periodistas. La tarde del mismo día, el vocero del gobierno federal Alejandro Poiré rechazó que cualquier actor del Estado (yo subrayo) pueda pactar con delincuentes: "negociar, postergar o suspender la lucha contra el crimen organizado, lejos de desaparecer la amenaza de la violencia, implicaría someterse a la ley de quienes agreden para intentar disuadir la acción del Estado y perpetuar su acción impune".

Aunque resbaló afirmando -sin ninguna averiguación concluida- que el asesinato del reportero no tiene relación con su oficio, Diario de Juárez había resbalado antes en el sentido contrario pero igualmente equivocado... impropio de periodistas profesionales.

martes, 31 de agosto de 2010

El segundo oficio más antiguo del mundo

El oficio del periodista, el periodista justiciero, la malformación de nuestros públicos...

(Trabajo en proceso, desde la discusión vespertina en casa de Miguel Ángel Vichique).

martes, 10 de agosto de 2010

Profesionales del pesimismo

Dice Héctor Aguilar Camín en su colaboración para Milenio de este martes 10 de agosto: "La conversación pública mexicana parece un café español de los de antes, un enjambre de iras y quejas, dicterios y fulminaciones que se satisfacen con enunciarse, antes de irse a dormir tranquilo".

En esta fiesta nacional del pesimismo, acusa, "nunca la prensa mexicana ha sido más crítica, más inconforme, más desencantada y más intratable que ahora; nunca ha sido más diversa, más influyente, menos sujeta a controles y más rentable como negocio que ahora". Es una Casandra próspera, bien pagada.

Sigue: no es que el pesimismo y la crítica estén de moda, es que son el boleto de entrada al mercado de la credibilidad pública. Y la gran pregunta, la gran provocación: ¿cómo hemos llegado a este otro extremo de la falta de rigor crítico que es criticarlo todo?, "puede ser la excrecencia histórica de medios que vivieron décadas de mordaza y ahora retozan de más sin ella".

Agrega una nota magistral en su colaboración del jueves 12 también para Milenio: la prensa es "un poder plural pero poco democrático. Sólo existe a plenitud en un entorno de libertades públicas y gobiernos incapaces de controlarla", paradoja sobre la que sostiene una provocación iluminadora: "el ágora moderna no es la suma de los espacios sociales comunes, sino de los medios privados que forman la opinión pública" (!!!)

Mi siguiente agregado es hasta el 25 de octubre, de un artículo provocador de Jesús Silva-Herzog Márquez en Reforma: "...hay otra tendencia paralela al fin del periodismo tradicional: el angostamiento de los espacios comunes, la paradójica disminución de la esfera pública. El lector-elector (...) depende cada vez menos del diario hegemónico de su ciudad y del noticiero de la gran cadena por la noche. Se informa con un paquete de información hecho a su medida. Lee lo que quiere leer; ve lo que quiere ver; escucha lo que quiere escuchar. El periodismo deja de ser una ventana para convertirse en una cazuela de espejo. Información para confirmar lo que se piensa y para reforzar los prejuicios. (...) Hemos construido una portentosa tecnología del solipsismo: instrumentos del aislamiento y de la polarización que bien pueden escapar de la exigencia cardinal de un régimen democrático: ofrecer razones, ventilarlas públicamente". Se trata entonces de "el hombre-cápsula. Sus oídos escuchan sólo lo que ha decidido oír; sus ojos ven sólo lo que quiere ver. No sabe más que lo que ya sabía. Su ignorancia es orgullosa porque encuentra siempre legitimidad en la ignorancia común".

miércoles, 14 de julio de 2010

Cultura: valor y participación

Mi amigo Jorge Pantoja me invitó a una mesa redonda organizada por el taller de promoción cultural que dirige en Casa Talavera, de la Universidad de la Ciudad de México, este martes 13 de julio a las 16:00 horas. Me retiré porque todavía a las 16:30 él no llegaba, y nadie de su taller parecía estar a cargo. Había aceptado porque me interesaba escribir algo sobre el tema propuesto, "¿Por qué no se paga a los artistas que participan en la celebración de los Centenarios?" Aquí lo desarrollo.

¿Por qué no pagan a los trabajadores de la cultura... por los centenarios o por lo que sea?

> Pantoja no me pagará
no todo se paga ni se cobra con dinero: una línea del curriculum, las ganas de apoyar a un amigo (en este caso, Pantoja y su taller), la compañía en esta mesa, la necesaria solidaridad con el gremio, el puro altruismo: si algo me gusta, yo trabajo aunque me paguen

> Conaculta no paga... Cultura DF no paga, tal vez así es también en los estados, en las universidades
por qué? por un presupuesto insuficiente siempre (la cultura siempre es lo último que se dota en un presupuesto, lo mismo en un gobierno federal, estatal, municipal o universitario que en la casa de ustedes; por la pinche burocracia, lo peor es un burócrata pendejo, corrupto y grosero, todos tenemos a nuestro favorito)

pero el problema va mucho más allá (debe mirarse mucho más allá) de esto, mucho más allá de que no nos pagan, nos pagan poco y tarde y de mal modo

integración del presupuesto > todos nosotros pagamos todos nuestros impuestos?

ejercicio del presupuesto > corrupción, desde luego, negligencia, sí, pero además y sobre todo (antes que nada) es un problema de estructura del presupuesto:

más presupuesto para la cultura? > más presupuesto para la burocracia de la cultura
80% del presupuesto es para salarios y prestaciones, por eso me pareció absurda aquella marcha por “más presupuesto para la cultura”, así como es absurda la insistencia por “más presupuesto para las universidades públicas”, así nomás, porque sí

más presupuesto para la cultura? > más presupuesto para becas y premios
esa es también nuestra prioridad, los “estímulos a la creación”?
y la discusión sobre los criterios para integrar jurados y entregar becas y premios?
y la formación de públicos?
y la construcción de infraestructura?

y luego viene la fase final del ciclo, de la que habitualmente nos desentendemos:
vigilancia y corrección del presupuesto y de la burocracia (“tenemos que hacer algo todos ustedes”)

que se liga con lo que dije casi al principio y con lo que quiero (casi) terminar:
la solidaridad del gremio, el espíritu de cuerpo
tal vez el problema no es cuánto nos pagan o no nos pagan, sino cuánto cobramos:
cómo valoramos nuestro propio trabajo?

reconocer, también con dinero, el valor del trabajo de los creadores y de quienes trabajamos con ellos, p.e. los promotores culturales, los periodistas, los investigadores y, sí, los funcionarios

por cierto, los artistas pocas veces son solidarios entre ellos mismos: cuántos asisten sistemáticamente a estrenos, inauguraciones, presentaciones?, están vacías si no hay coctel

si las instituciones (gobiernos y universidades, únicos patrones), y los públicos (educados en la entrada libre, el arte y la cultura gratuitos, la vieja cultura priista del subsidio), no valoran el trabajo en arte y cultura, también es común / normal que los trabajadores de arte y cultura no valoren el indispensable trabajo asociado, que le da sentido al trabajo de los artistas: la gestión, la promoción, la representación, la difusión, la investigación cultural

yo creo que el problema es precisamente el seguir dejando, por comodidad, al gobierno / Estado la responsabilidad de establecer políticas culturales, integrar burocracias y ejecutar su presupuesto

(Trabajo en proceso).

lunes, 14 de junio de 2010

Aguascalientes. Cuatro estaciones sonoras

Vengo de una ciudad donde el silencio es un bien escaso y precario, amenazado a cualquier hora por el claxon de los siempre demasiados automóviles, por los insoportables vendedores de música robada en el transporte público. Vengo de una ciudad donde alguna vecina manda podar la jacaranda frente a su ventana porque el escándalo de los pajarillos no la deja dormir.

Vengo de una ciudad sometida por el ruido. El ruido de la ciudad que oculta la música de la ciudad, y de sus habitantes. En nuestro ir y venir de cada jornada ignoramos que la ciudad reclama reconocernos en su sonoridad, olvidamos que nuestra ciudad es para vivirla con todos los sentidos.

En “Luvina”, Juan Rulfo nos emociona con el misterio de sus murmullos eternos: “Poco después del amanecer se calmó el viento. Después regresó. Pero hubo un momento en esa madrugada en que todo se quedó tranquilo, como si el cielo se hubiera juntado con la tierra, aplastando los ruidos con su peso... Se oía la respiración de los niños ya descansada. Oía el resuello de mi mujer ahí a mi lado: -¿Qué es? -me dijo. -¿Qué es qué? -le pregunté. -Eso, el ruido ese. -Es el silencio”.

Pero lo contrario del ruido no es el silencio. Detrás de ese caos sonoro hay una vida, una historia, incontables vidas, infinitas historias.

La hacedora de las “esculturas sonoras” que hoy se presentan conoce el principio esencial. La radio se escribe con sonidos. Conoce el valor de los sonidos, sabe organizarlos creativamente, toma la apuesta por una radio multisensorial, una radio a colores. Lo descubrió 15 años antes, con su primer premio, 15 años en los que no ha dejado de imaginar “ruiditos” con sabor a plata.

En estas “esculturas sonoras” hay una pieza que me gusta particularmente, porque el principio y el final hacen escucharla con la misma disposición de ánimo: empieza con pajaritos que de pronto ya no se escuchan por el estruendo de las máquinas, termina con la voz del anciano añorando la tierra que había bajo el concreto... es el retorno al origen, que puede serlo del ruido pero también de la música de nuestra propia ciudad.

Luigi Amara ganó en 2006 el Premio Hispanoamericano de Poesía para Niños. En un libro más reciente, que realizó y llamó “A pie”, escribe: “Hansel buscando a Gretel / en todas las esquinas / aprendiendo a perderse / en el bosque sonoro de la urbe / siguiendo pistas falsas / tejiendo la maraña del hoy”.

Así quiero imaginar éste año entero de registro errante de sonidos, el hallazgo de fragmentos sonoros que fueron puntos de fuga para una imaginación viva. Historias germinales, historias errantes en la memoria y en el sueño, de esas que nos atrapan al pasar y luego dejamos ir así nomás.

Se mueve amorosamente entre una ciudad y sus sonoridades cambiantes. De pronto se queda inmóvil, morosa, detenida por el rumor de un sonido escondido entre el tráfico, el murmullo de la vida que se agita en la calle y el mercado, una fiesta y algún amanecer. Se deja envolver por la ciudad en movimiento, movida por sus propios sonidos. Sonidos humanos después de todo que, si de veras escuchamos, encontraremos mezclados con esos sonidos olvidados, ignorados, vitales, de la naturaleza atrapada.

¿Cómo no acercarse, confiados y emocionados, al trabajo de alguien lo bastante sensible como para dolerse ante la pobrecita letra hache, que se siente sola porque nadie la escucha?

Aproximarse informadamente a un caos sonoro, reconocer las sonoridades de sus partes, jugar con ellas, y convertirlas en un discurso significativo, útil, divertido. Si eso es hacer radio, entonces sin duda hoy conocemos un claro ejemplo de muy buena radio. Y yo agradezco que se me haya permitido participar así de cerca en su presentación pública.

Leído en la presentación de "Aguascalientes. Cuatro estaciones sonoras", de Sandra Romo, en la Casa de la Cultura de Aguascalientes el jueves 10 de junio de 2010.

lunes, 24 de mayo de 2010

Periodismo de presunción, presunto periodismo

Pascal Beltrán del Río, periodista, director de Excélsior, escribe en su columna del domingo 23 de mayo una -otra- gran lección de periodismo, ahora a propósito de la desaparición del Jefe Diego: "Por supuesto que la elaboración de hipótesis es fundamental en el trabajo periodístico. Es la manera de orientar un reportaje, por ejemplo, pero la investigación que realiza el reportero sirve para confirmar o desmentir la hipótesis. Es decir, una hipótesis publicada a manera de información sólo termina confundiendo, y no es raro que en este país —tan dado a la suspicacia, en ocasiones de manera justificada— esas versiones acaben siendo asumidas como la verdad… sin serlo". Pero, por otra parte, "una cosa es aportar información de contexto, debidamente confirmada, y dejar al lector en libertad de llegar a conclusiones o establecer sus propias hipótesis, y otra es atar cabos por él, sin que los cabos sean reales".

miércoles, 5 de mayo de 2010

Medios unidos contra la delincuencia organizada

Héctor Aguilar Camín comenta hoy en Milenio el editorial de El Universal ayer sobre la ausencia de una política definida de los medios -y los periodistas- ante la delincuencia organizada.

Ante la irrupción plenamente pública del narcotráfico con su espectacular y amedrentadora violencia, empujado por la ofensiva militar y policiaca del gobierno federal, dice con razón el editorial de El Universal (su director es el periodista Jorge Zepeda Patterson), todos, incluso "los periodistas, nos quedamos pasmados".

"Lo cierto es que los medios de comunicación en México no tienen aún claro cual es el papel que deberían desempeñar, en conjunto, ante una sociedad seriamente amenazada por los criminales". "Este aislamiento es una de las principales razones por las que los criminales florecen en regiones enteras del país. Porque pueden imponer el silencio (...) La falta de fraternidad deriva en desconfianza y la desconfianza en desprotección, no sólo de los medios sino de la sociedad entera". Y llama a ensayar "lo que los criminales más temen de nosotros: la unión en su contra".

Dice Aguilar Camín (por cierto, director de Nexos): "¿Quién convoca? Ya que ha planteado tan bien el problema, creo que El Universal sería una primera opción. En lo que pueda ayudar, estoy dispuesto". Yo también le tomo la palabra, ¿quién dice yo?

El domingo 9, Pascal Beltrán del Río (director de Excélsior) informa en su columna semanal: "El pasado lunes 3, Día Internacional de la Libertad de Prensa, nos reunimos (...) representantes de los diarios Cambio de Michoacán, Milenio, El Universal y Excélsior para dar forma a un esfuerzo de coordinación del gremio periodístico en torno de los retos y riesgos que representa para nuestro oficio la cobertura de los hechos de violencia que protagoniza el crimen organizado (y) acordamos que cualquier acto de hostigamiento contra la labor informativa, sea cual fuere el medio del que se trate, será asumido por los participantes como una agresión contra todos y denunciado e investigado como tal". A ver.

martes, 20 de abril de 2010

Resistencia al control estatal de los medios

La colaboración de Jorge Fernández Menéndez hoy en Excélsior hace un buen resumen del contexto en el que se discute una posible nueva legislación para la radiodifusión y las telecomunicaciones en México, aunque interpreta que la iniciativa del PAN y el PRD presentada simultáneamente en ambas cámaras del Congreso "no es sino un nuevo intento de establecer mecanismos de censura en los contenidos".

Anticipa que el director del nuevo Organismo Promotor de Medios Audiovisuales -creado por un decreto presidencial el 31 de marzo, para agrupar a todos los medios gubernamentales ahora en la Secretaría de Gobernación- será ¡un funcionario del Cisen!, el ex coordinador de administración y finanzas Alejandro Ordoño Pérez.

El primero que llamó la atención sobre esta semiclandestina estrategia presidencial fue Fernando Mejía Barquera, en su columna del jueves 8 en Milenio.

Gabriel Sosa Plata, hoy mismo en su blog de El Universal, responde al delirante desplegado de ayer de la Cámara de la Industria de Radio y Televisión con una glosa de la iniciativa de "reforma integral". Su texto comprende una indispensable liga a la Asociación Mexicana del Derecho de la Información (Amedi), que preparó una presentación como resumen de tal iniciativa.